Preso entre las sábanas me siento empequeñecer. Intento no pensar pero estoy al límite. Mi mente desdibuja la realidad y crece un dolor intenso. Necesito tu mirada desde este desierto en el que deambulo pérdido, y en donde sólo yo percibo esos otros mundos de los que nadie tiene conciencia. El pasado fue mejor de lo que entonces creía, cuando no necesitaba el maná milagroso que cada noche me brindas y que borra la angustia inventando una oscuridad más dulce y hermosa. La vida parece más suave. Duermo. Luego al amanecer los espejismos volverán a brotar en esta existencia ahora en reposo.
Sentir y vivir la irrealidad. Escapar y abandonarse en lo auténtico, forjándolo, aunque el resultado no convenza, pero es nuestro y es lo que hay...
viernes, 15 de noviembre de 2013
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Un instante de vida relatado desde una reflexión muy fin dibujada.
ResponderEliminarEstado de ánimo y sentimientos al amanecer....
Marinela
En la calma de la noche, todo se magnifica hasta los mismos pensamientos. Muy bien transmitido ese sentir.
ResponderEliminarUn abrazo.
"Necesito tu mirada desde este desierto en el que deambulo pérdido, y en donde sólo yo percibo esos otros mundos de los que nadie tiene conciencia".
ResponderEliminarTambién necesito algo así. Es bellísimo.
un abrazo